domingo, 29 de junio de 2008

La Batalla de San Marcial

Vista del monte San Marcial desde Gasteluzar.



Tras la conquista del Reino de Navarra por Fernando I y anexión a la Corona de Castilla en el año 1512, el rey francés, Francisco I, que había intentado sin éxito hacerse con el pequeño reino, trató de conquistar diversas plazas fuertes para desde allí hostigar a las tropas españolas. En este contexto tuvo lugar la denominada batalla de San Marcial.



"Aunque la Villa de Fuenterrabia era poseída de franceses, el castillo de Beovia habiéndole cobrado de su poder por la orden sobredicha, estaba por Alcaide el dicho Capitán Ochoa de Asua, con algunos soldados, los más de ellos jubilados por ser de edad. Los franceses, deseaban tomar a su poder el castillo de Beovia, porque además del daño y estorbo que en el Paso Real de Francia para estos reinos les causaba, sentía a aprobio, que teniendo ellos Fuente-rrabia, viese tornado a poder de los españoles media legua de aquella Villa esta fortaleza, guardada con tan poca gente, por la espalda y a favor que los naturales de Irún Uranzu, en cuyo distrito cae aquella fortaleza, les hacían." Esteban de Garibay.



La ermita de San Marcial vista desde Gasteluzar. ==>



Las incursiones comenzaron en octubre de 1521 con la conquista de Fuenterrabía, pero no fue hasta el 28 de junio de 1522 cuando un ejército de 4.500 mercenarios franceses y alemanes intentan cruzar el río Bidasoa en dos gabarras para sitiar el castillo de Behovia o Gazteluzar (castillo viejo), situado frente a la isla de los Faisanes y el paso de Behovia.



Siendo rechazados por sus defensores y la gente de Irún, se dirigen rio arriba y a media noche vadean el río y toman posiciones en el monte que domina el castillo, que hasta entonces se conocía como la Peña de Aldabe, recibiendo este nombre por un caserío existente en el lugar. Al día siguiente, 29 de junio, día de San Pedro y San Pablo, se quedan los franceses en lo alto del monte mientras los lansquetes alemanes descienden con la artillería desde Aldabe, rodean Gazteluzar y abren fuego sobre él.



Ante tal la situación, los capitanes Juan Pérez de Azkue y Manuel de Ambulodi convocaron, según fuero, a los varones hábiles para la guerra de Irún, unos 400. La concentración de la milicia se realizó en tres lugares de Irún, a donde también acudieron hombres de Fuenterrabía, Rentería y Oyarzun, y el Capitán General de Guipúzcoa, D. Beltrán de la Cuevan con sus tropas.



En la madrugada del 30 de Junio, el clérigo de Rentería, Mosén Pedro de Hirizar, vecino de la citada villa y que tenía el oficio de "tenedor de bastimientos", compró y distribuyó más de cuatrocientas "hachas de palo" entre las mujeres y los mozos de la ciudad con el objetivo de que caminaran, en silencio y con las hachas ardiendo, durante una legua por el Camino Real, desde el alto de Guruche, que dividía los caminos de Oyarzun y Rentería, hasta la plaza de Irun, haciendo creer al enemigo que los soldados iruneses estaban reunidos en la zona de Irun y no avanzando hacía la Peña de Aldabe.



Las ruinas de Gasteluzar vistas desde la ermita de San Marcial.



Mientras mujeres y niños caminaban por el Camino Real, las tropas irunesas capitaneada por los citados Perez de Azkue y Ambulodi, con la ayuda del Capitán General de Guipúzcoa, Beltrán de la Cueva, que acudió a la batalla con parte de su infantería, 1.500 hombres, y 150 caballos, avanzaban lenta y sigilosamente por el lado opuesto, dirigiendose a la cima de Aldabe y atacando por sorpresa a los franceses que dormían en el monte, que se dieron a la fuga.



El capitán Ambulodi al mando de las milicias de Irún, atacó a los alemanes que sitiaban Gazteluzar y después fingieron huir hacia la Peña de Aldabe. Los alemanes, que no conocían la toma de la cima, creyendo cogerlos entre dos fuegos, los persiguieron hasta allí, donde se encontraron inesperadamente con las tropas de Beltrán de la Cueva que les derrotó.



Según el cronista Garibay:



"Fueron muertos mas de dos mil y ocho cientos alemanes, así por las armas como ahogados en el río bidasoa, queriendo huir a Francia, y con ellos murió su Coronel. Los que a vida quedaron siendo hasta setecientos alemanes, hicieron junto al castillo un escuadrón, tan cerrado, que ningún podía llagar a romperlos, aunque el Alcaide del Castilla jugaba con la artillería, hasta que el General D.Beltran descendiendo de la casa de Aldave, los rompió con la caballería y fueron luego presos todos. Todo esto se hizo antes de que el sol saliese, siendo cosa muy de notar, que en la batalla donde hubo tanta efusión de sangre, que solo un español muriese, el cual aun no fue muerto de los enemigos, sino de los suyos, pensando ser enemigo, por haberse vestido las ropas de un alemán de los muertos. También murió un hombre de armas ahogado en el río vidasoa, por tener el caballo desbocado. Sucedió también otro notable caso, que un soldado castellano, de oficio zapatero, llamado Pedro Ladrón siendo muy desbocado y blasfemo, fue herido de una bala de espingarda en la lengua, que fue juzgado por divina permisión, aunque la herida no fue mortal."



Dado que la victoria se produjo el día 30, festividad de San Marcial, se edificó en el alto de Aldabe una ermita dedicada al santo y el monte paso a denominarse con el nombre de éste y el tradicional alarde de Irún pasó a celebrarse en éste día.





Tres siglos despúes, el 31 de Agosto de 1813, tuvo lugar la II batalla de San Marcial contra las tropas napoleónicas.





Para saber más:



Que es el alarde, de www.alardedeirun.com

Historia, de www.sanmarciales.com

Primera batalla de San Marcial, de Wikipedia.

2 comentarios:

Sólo comentarios relacionados con el artículo, gracias.